Historia del pastor alemán
Historia del pastor alemán; el trotador incansable.
Historia del pastor alemán; un pasado con mucho futuro.
La Verëin für Deutsche Schäferhunde (SV) es la institución matriz de la raza en la madre patria del Pastor Alemán.
Es el mayor Club de una raza canina existente en el mundo. Con más de 150.000 socios activos en la actualidad, y con más de 1´000.000 a lo largo de sus más de cien años, constituye la mayor potencia en el mundo de las sociedades cinófilas.
Fundada simultneamente con la propia raza, ha velado por su desarrollo, mejoramiento y selección de sus ejemplares, logrando que ésta sea hoy la más popular, la más extendida y la más apreciada en el mundo entero por sus extraordinarias cualidades y aptitudes en todo tipo de actividades y cometidos.
La SV tomó forma a partir de una situación previa de aislamiento o separación, y fue concebido como una necesidad para llevar a cabo un proyecto común.
Turbulentos principios del Siglo XIX.
En una Alemania dividida, muy distinta de la actual, y con unas regiones naturales donde la actividad ganadera estuvo arraigada desde tiempos inmemoriales.
Por entonces toda Europa había caído bajo el imperialismo napoleónico y la mayor parte de sus pueblos se habían alzado en contra de los ejércitos franceses.
Todos se aliaron para oponerse a Napoleón, que fue vencido en 1813 en la llamada “Batalla de las Naciones”, en Leipzig, restableciéndose el orden político.
En ese tiempo, Alemania formaría parte de la llamada “Confederación Germánica”, presidida por Austria, y en la cual también se integraba Prusia.
La situación económica de todo el viejo continente había quedado muy resentida con las guerras, y surgieron por todas partes corrientes liberales que llevaron a los pueblos a sentir la necesidad de constituir nacionalidades más fundadas en su afinidad y comunidad histórica, geográfica, étnica y lingüística.
Se produjeron entonces segregaciones y anexiones territoriales voluntarias por doquier. Este último fue el caso de Italia y de Alemania. Guillermo I fue el artífice de la unificación alemana, con la colaboración del Canciller Otto von Bismarck, apodado “el canciller de hierro”.
En 1871, tras la guerra franco-prusiana, Guillermo I fue proclamado en Versalles Emperador de Alemania, naciendo así el II Reich (Reich en alemán significa imperio), que unificó los estados del norte y del sur, que habían permanecido separados hasta entonces.
Württemberg y Turingia múltiples cunas, para construir la historia del pastor alemán.
En esa nueva situación, los ovejeros de Turingia al norte, de Sajonia al oeste y de Württenberg al sur del nuevo imperio entraron de nuevo en contacto.
Cada uno de ellos había desarrollando razas autóctonas de valiosos perros auxiliares en las labores de custodia y conducción de sus rebaños, y comenzaron a intercambiar tanto sus conocimientos como sus especímenes de pastoreo.
Se trataba de complementar, mejorar y compendiar las cualidades de cada uno de aquellos ejemplares en los múltiples cruces que realizaron entre ellos.
Hacia 1890, el Capitán Rieckeimann-Dunau y el Conde von Háhm fundaron el llamado «Phylax Club», tal vez la primera Sociedad Nacional para el desarrollo de los perros de pastor en Alemania, que agrupaba a criadores de perros de pasto, con el proyecto de mejorar las cualidades de los ejemplares existentes en cada región.
Esta interesante iniciativa no prosperó a causa de las luchas internas surgidas por tratar de imponer cada cual su tipo particular, pero sin duda alguna, se constituyó en semilla fundamental para el desarrollo de un proyecto posterior.
Sería el famoso Capitán Max Friedrich Emil von Stephanitz, años más tarde, el que, junto a su buen amigo Arthur Meyer, recogería el testigo y emprendería de nuevo esta tarea, convirtiéndose en el motor y autentico impulsor de una nueva raza nacional nacida de la unión de los distintos especímenes regionales.
Fue en 1899 cuando, por primera vez se presentarían en una exposición unos ejemplares bajo la nueva denominación de Deutsche Schäferhunde (Perro de Pastor Alemán).
A raíz de ello, y bajo el auspicio de von Stephanitz y de Arthur Meyer, a los que se anexionaron un pequeño grupo de aficionados, criadores y ganaderos, se empezó a gestar la creación del que sería el mayor Club canino del mundo: Verëin für Deutsche Schäferhunde (SV).
Historia del pastor alemán. Fundación de la SV alemana.
El 22 de abril de ese mismo año fue la fecha en la que se produciría su fundación formal, constituyéndose von Stephanitz en el primer Presidente de su historia.
Karlsrühe fue el escenarío. Una de las primeras y más imprtantes instituciones de este Club fue la creación de un primer Libro de Registro tremendamente novedoso para la época y valiosísimo instrumento de control y selección para el futuro.
Hasta ese momento habían existido unos libros en los que se inscribían los ejemplares más destacados, registrando sólo su fenotipo o apariencia y recogiendo unos padres que se aceptaban bajo la simple declaración de su propietario.
El «Scháferhunde Zuchtbuch»
(Libro de Cría de Perros de Pastor, y que abreviadamente se designará desde entonces como el SZ).
Incorporaba, en efecto, una estructura y un planteamiento bien diferente; se trataba de recoger en él la genealogía de los ejemplares inscritos.
Es decir, la obtención de los ascendientes de cada perro en cuatro generaciones anteriores, a partir de los ancestros ya registrados, que serían desde entonces todos los dedicados a la crianza, destacaran o no en las exposiciones.
El SZ fue una revolución para la época, pues se convertía en un eficaz banco de datos para acreditar la procedencia de cada perro en particular.
Con él se podría desde entonces realizar la fehaciente emisión de un pedigree formal para cada ejemplar, convirtiendo al SV en una seria institución, pionera en el control genealógico de una raza.
El primer registro en e1 «Scháferhunde Zuchtbuch» fue el de «Horand von Grafrath».
Con el número SZ 1, el mítico ejemplar adquirido por Stephanitz el 15 de enero de 1898, fue criado por Sparwasser, de Frankfurt-Sachsenhausen. Aquel perro podemos decir que es el origen de todos los pastores alemanes.
A la par que este Libro de Orígenes, el Club instauró desde un principio también la magna exposición anual de cría en Alemania, la SV-Siegerschautputzchau, en la que todos los socios y criadores encontrarían la oportunidad de dar a conocer los mejores ejemplares de su trabajo en la crianza.
En ese mismo año de 1899 se celebró 1a primera edición de esa tan especial exposición que, desde entonces, centra la atención de los aficionados a la raza en todo el mundo.
El tercer pilar sobre el que asentaría su base de partida el SV fue la confección de un Standard de la raza.
El 20 de septiembre de 1899, en el Congreso celebrado en Frankfurt fue presentada y aprobada la primera redacción del mismo, con no mucha precisión inicial, que haría necesarias posteriores revisiones, pero que daba ya la primera descripción anatómica de la recién nacida raza.
La «SV-Zeitung», o revista del SV. crónica permanente de la historia del pastor alemán.
Otra de aquellas primeras y fundamentales instituciones del Club la constituyó la publicación de un Boletín Informativo y de divulgación; un instrumento que se convertiría además en imprescindible medio de información y comunicación entre todos sus socios: la «SV-Zeitung», o revista del SV.
publicó por primera vez en 1902 con una periodicidad variable en el tiempo hasta nuestros días, en la cual cuenta con una edición al mes.
Los artículos que esta publicación ha incluido siempre, han constituido auténticos documentos de las tendencias, logros y reveses surgidos en la crianza, a través de las valiosas opiniones de los más expertos cinófilos y criadores adscritos al mundo del Pastor Alemán.
En los primeros años del siglo XX, el éxito selectivo había acompañado a la cría, y a base de cruces en principio de fuerte endogamia (inbreeding), se había conseguido un tipo bien definido, distintivo para la raza.
«Deutsche Schäferhunde (Pastor Alemán)», o el orgullo de una nación.
Se pudieron constatar unas aptitudes psíquicas comunes a los perros, que les conferían homogeneidad y unas extraordinarias capacidades de utilización en otros menesteres bien diferentes de su primario empleo para el pastoreo.
Así, ya en 1901, el SV instó a las policías locales de toda Alemania para el aprovechamiento de las cualidades del «Deutsche Schäferhunde (Pastor Alemán)» en su servicio.
Un poco más tarde, en 1902…
Stephanitz se congratulaba, en un artículo publicado con el título de «Perros de Policía y de Guerra» de haber conseguido su empleo en al menos medio centenar de ciudades alemanas. Esto habla de su enorme éxito de adaptación, significando la «especial idoneidad para el servicio policial” de la raza.
Desde esa época en adelante, Stephanitz se afanó extraordinariamente en divulgar la utilidad del perro de pastor alemán, escribiendo infinidad de artículos y algún libro al respecto.
Una frenética actividad ante todas las administraciones sirvió para dar a conocer ese tremendo potencial que la raza poseía como perro de servicio.
En 1903 la SV implantaron las primeras pruebas de instrucción para los pastores alemanes
Se efectuaron los primeros exámenes de trabajo que, ya entonces, se dividieron en tres partes fundamentales, el rastreo, la disciplina u obediencia y la guarda, defensa o protección.
Hasta 1906 no se instituiría el título de Campeón de Trabajo y la correspondiente SV-Siegerschauprüfung (o campeonato anual de trabajo, a semejanza de la Siegerschau de estructura).
Puede decirse que transcurrieron unos años de selección orientada por criterios de utilidad, dejando un poco de lado el fenotipo y la morfología, que se consideraba suficientemente lograda, quizás, hasta ese momento en la historia del pastor alemán.
Y llegó la Primera Guerra Mundial. Transición en la historia del pastor alemán.
El episodio gris de la historia universal, un período que interrumpió las normales actividades de la SV, pero que sirvió para la palpable demostración de las inmensas cualidades que el Pastor Alemán posee.
Fueron muchos los perros que se integraron en las fuerzas armadas alemanas, desarrollando exitosamente muy diversos cometidos.
Fundamentalmente, los perros, examinados previamente para descubrir sus mejores aptitudes, recibían dos tipos de distintivos: el KrH, destinado a los «perros de acción en la guerra», y el SH que ostentaban los perros «sanitarios», los ocupados en la búsqueda y rescate de heridos primordialmente.
Aquellos perros que participaron en esa conflagración desempeñaron a la perfección sus papeles y demostraron sus aptitudes fuera de lo común en los distintos cometidos que les fueron encomendados. Ello le valió a la raza su «universalización», su reconocimiento a nivel mundial como inmejorables perros de utilidad.
Primer gran admirador, el enemigo.
Es extraño que se pueda llegar a hacerse admirar por un enemigo, y sin embargo los Pastores Alemanes lo consiguieron en esa guerra. Era clarísima la positiva impresión que produjeron en los que lucharon frente a ellos; algo que dice mucho acerca de su inteligencia, coraje, fidelidad, valor, capacidad de resolución, etc… todas esas cualidades la raza hoy conserva con fidelidad.
Durante los años veinte la historia del pastor alemán se extendió fuera de las fronteras alemanas, y en Francia, en Inglaterra y en los Estados Unidos (por citar las naciones más involucradas en aquella pasada guerra) el Pastor Alemán comenzaba a protagonizar un «boom» impresionante.
Corría 1920; el señor George Barais fundaba la Societé du Chien de Berger Allemand (SCBA), émulo del SV en Francia. En Suiza, la señora Harrison Eustis comenzó a criar con el afijo «Fortunate Fields» con un ambicioso proyecto de experimentación de las utilidades de la raza, descubriendo un nuevo campo de aplicación importantísimo, la dedicación a perros lazarillos de invidentes.
La industria cinematográfica en EEUU lanzó al estrellato a dos personajes caninos representados por Pastores Alemanes, ‘Rin-tin-tin’ y ‘Strongheart», algo que incrementó su fama internacional.
El Club estadounidense que se había creado en 1913, en 1914 había realizado la primera importación de élite, pero era ahora cuando la crianza del pastor alemán cobraba mayor auge al otro lado del Atlántico, y cuando las importaciones desde Alemania alcanzaban cifras millonarias.
Pero el período bélico habia hecho degenerar un tanto la cria en aquellos años, en los que primaría la cantidad sobre la calidad, produciéndose un peligroso deslizamiento a tallas muy superiores a la media exigida por el Standard y a tipos mas bien “cuadrados”, sin una relación largo-alto proporcionada.
El “Körung” o el proceso de selección.
Por otro parte, surgieron perros con síntomas de inseguridad en su carácter, fruto de aquella época de escasa selección. Por todo ello, en 1922 el SV adoptó un sistema de confirmación y examen de los reproductores, el “Ankörung”, que ha perdurado hasta nuestros días.
Mediante las pruebas del “Körung” se pretendía, y también hoy se pretende realizar una selección de los ejemplares en base a sus cualidades anatómicas, morfologicas y sicológicas. Através de un profundo análisis de la talla, medidas y proporciones, peso, estructura estática y capacidad de movimiento, estabilidad del carácter y su respuesta al disparo y a una prueba de coraje o defensa.
Además se efectúa un estudio de su pedigree y consanguinidades, dando finalmente un amplio y completisimo “rapport” (reporte, informe o súmula): 2l Körung, que detalla todas las peculiaridades y rasgos del perro con un comentario final del “Körmeister”,“maestro confirmador” o “maestro de selección”) acerca de su más recomendable empleo para la crianza, con el fin de aprovechar sus mejores virtudes y de evitar sus posibles defectos en la descendencia a que pueda dar lugar.
Se establecieron dos clases de Kórung o calificación final:
El Körklasse 1ª (Kkl.1ª) y el Körclasse 2ª (Kkl.2ª), según que el perro estuviera libre o no de defectos penalizables como leves, y negando el Ankörung a aquellos considerados con defectos graves y problemas de carácter.
La importancia del Körung es evidente hoy. Se trata de efectuar la selección de los mejores reproductores para perfeccionar la raza y desechar defectos que puedan aparecer en la crianza.
Es un examen completo, de estructura, funcionalidad y carácter, y exige además tener alguna escuela de trabajo aprobada, por lo que supone una selección integral, tanto desde el punto de vista del standard como de la utilidad misma, y por ello debe ser apreciado por todos nosotros en lo que vale.
De nada sirve un perro extraordinariamente «bello» y funcional sin un carácter adecuado, como tampoco sirve un «monstruo» del trabajo que no pueda pasar una mínima comparación anatómica con el Stándard de la raza. Hemos de criar perros «integrales», o al menos poner todo nuestro esfuerzo en ello.
Granja de Ossig – Vivienda de Stephanitz y el afijo «Von Zuchtgut» propiedad de la SV.
En 1924, y con motivo de las bodas de plata del Club, la SV tomó la decisión de adquirir una gran finca rural en Ossig, en la región de la Prusia oriental.
Este vasto terreno, propiedad de los socios, que habían llegado ya a los 57.000, cuando en 1918 eran sólo 5.900, se dedicó a la explotación agrícola y a la ganadería ovina, aunque, ante todo, sería el centro experimental más grande de cría de Pastores Alemanes que en todos los tiempos se ha llegado a conocer.
Los ejemplares allí nacidos se registraban bajo un afijo propiedad de la SV, «Von Zuchtgut» (que traducido vendría a significar «de buena crianza»).
Estos no se comercializaban, sino que quedaban a disposición del Club para mejorar la cría, o bien, a los no considerados adecuados para ello, se les cedía a ganaderos o pastores para su utilización en las labores propias de su oficio.
«El pastor alemán en imagen y palabra»
La «Granja de Ossig» fue además la residencia del Presidente Max von Stephanitz en el poco tiempo que duró. Efectivamente, con tan sólo un año de existencia, y con unos resultados lógicamente poco significativos para ese corto período de funcionamiento, el proyecto se abandonó, aunque, eso sí, sirvió para que el Capitán pudiera llegar a editar una valiosísima obra cinológica titulada «El pastor alemán en imagen y palabra» que unía la siempre extraordinaria pluma de su autor a un excelente trabajo de documentación gráfica.
Por aquel tiempo, el Club había crecido, aproximándose ya el número de socios a los 60.000. El trabajo administrativo había aumentado tanto que se hizo necesario contratar un director gerente, y entró a ocupar ese puesto Fritz Schäelle, alguien que llegó a ser entrañablemente apreciado en el seno del Club.
La SV desarrolló una enorme actividad desde entonces; se instituyeron concursos de fotografía, se editó por vez primera el libro de afijos de criadores de la raza y aparecieron las primeras publicaciones de carácter técnico sobre crianza y adiestramiento.
El Congreso celebrado en Wiesbaden el 5 de septiembre de 1930 vivió la tercera revisión del estándar, tras las efectuadas en 1900 y 1901.
Se trató de adaptar a una nueva realidad de la raza, que había avanzado enormemente tanto en su carácter utilitario como en la propia apariencia y estructura, y que se revolucionó con el Sieger de 1925, «Klodo v.Boxberg», y su descendencia.
Cambios reformas y mejoras en la historia del pastor alemán por la consolidación de la raza.
Muchas reglamentaciones internas del Club sufrirían también importantes cambios. Por ejemplo, una reforma a realizar fue en el reglamento de crianza, en cuanto a la utilización de perros monórquidos en la reproducción, que hasta 1927 se había permitido, en la creencia de que no era un carácter hereditario.
También preocupaba la solidez de los ligamentos dorsales que se había perdido en parte con la implantación de estructuras más longilíneas, y ello era objeto de discusión e investigación en el seno de la SV.
El 22 de abril de 1936 falleció von Stephanitz,
Poco antes del fallecimiento de von Steophanitz, cedió la presidencia al Dr. Roesebeck, de Hannover, y que desde 1909 formaba parte de la Junta Directiva del Club. Este se hizo cargo temporalmente de una forma provisional, hasta la convocatoria de elecciones de una nueva junta.
Finalizaba así una etapa, que, con un marcado régimen presidencialista que siempre ha tenido en su funcionamiento interno, correspondía a la «Era von Stephanitz», al período en el que los destinos tanto del Club como de la propia raza estuvieron regidos por su creador y fundador, el capitán retirado de caballería Max von Stephanitz.
Fue la etapa quizás más importante de la historia del pastor alemán y de la SV, pues empezó con su misma constitución y supuso la consolidación y la estructuración formal del Club, que además vivió los tiempos de mayor difusión y crecimiento.
La herencia de von Stephanitz era un «Deutsche Schäferhunde» (Pastor Alemán) que había llegado al primer puesto en la consideración de todos por su tremenda utilidad y un Club sólido y firme que agrupaba a multitud de aficionados y criadores, y que era la más importante salvaguarda de la misma raza, que von Stephanitz supo universalizar.
«KURT ROESEBECK» – LA CONTINUIDAD.
En el mismo año 1.936 se celebraron las elecciones y fue nombrado oficialmente como presidente el Dr. Kurt Roesebeck, quien siguiendo la línea de su predecesor en el cargo, en cuanto a la preocupación por la utilidad del Pastor Alemán, una de las primeras medidas que adoptó fue la de imponer la exigencia de tener aprobadas unas pruebas de trabajo para conseguir en la Siegerschau la calificación de «Vorzüglich» (o «Excelente»).
Pero poco después Alemania se ve nuevamente envuelta en una guerra contra todos, la Segunda Guerra Mundial, y desde 1938 a 1945 el SV se ve imposibilitado de continuar libremente con sus actividades, controlado por el régimen del III Reich.
Los Pastores Alemanes, claro está, fueron de nuevo utilizados masivamente en las batallas, volviendo a rendir a plena satisfacción, pero ahora con mayor número de tareas encomendadas, avanzándose mucho en su especialización.
Así, existían entonces más distintivos de formación que en la guerra del 14, a los ya conocidos SH (perro sanitario), el KrH (perro de acción), se unieron el SuchH (perro de búsqueda), el MH (perro de aviso), el SchH o «Schutzhund» (entonces perro de protección o defensa), el PH (perro de policía), el FH (perro de rastreo), el DH (perro de guardia o centinela), el GrH (perro de patrulla de fronteras), además de los de usos civiles, como el HGH (perro de pastor), el BlH (perro lazarillo) o el LawH (perro de avalanchas).
Terminada la guerra, se implantó en 1945 una prueba, el Zpr o «examen para la crianza» o (apto para la cría), de una más simple estructura, destinada a calificar unas aptitudes básicas en los perros para poderlos autorizar para la reproducción.
En las elecciones de 1945 Roesebeck daría paso al nuevo presidente Kaspar Katzmair, después de haber enfrentado los dificiles años del nazismo y de la segunda conflagración mundial.
«KASPAR KATZMAIER» – EL PASTOR ALEMAN MODERNO
Desde los años 1946 y 1947 se reanudarán las celebraciones de las SV-Siegerschau, teniendo lugar dos Siegers cada año, una en zona británica y otra en zona americana y al año siguiente en la británica y en la «trizona», dentro de aquellas particiones del territorio alemán que los aliados habían acordado.
En 1948 se acuerda la formación de la República Federal Alemana, en territorio occidental, y en 1 949 la URSS organiza la República Democrática Alemana, al Este de Berlín, materializando la ruptura y división de Alemania en dos Estados diferentes, situación que perdurará bastantes años.
La SV, a partir de entonces, permanece en la RFA, continuando sus actividades en el lado occidental y perdiéndose prácticamente el contacto con los aficionados del otro lado del conocido «muro de Berlín».
Este será el comienzo de la verdadera «disociación circunstancial que la raza sufrirá en dos tipos bien distintos, el occidental, más preocupado por la funcionalidad estructural, y el oriental, centrado sólo en el aspecto utilitario del trabajo.
Algo que en el resto del mundo encontrará eco, decantándose unos por la primera tipología y otros por la segunda, empezándose a hablar ya de «líneas de belleza» y de «líneas de trabajo», algo que ha supuesto, a nuestro entender, el mayor daño que se le ha podido hacer al perro de Pastor Alemán, pues ni unos ni otros conservan la esencia de la raza, como perros integrales que deben ser siempre.
Antes, en 1947, la SV se vistió de luto ante las casi simultáneas muertes del Dr. Roesebeck y de Herr Fritz Schäeller.
Katzmair continúa en la Presidencia del Club e impone la nueva norma, avanzando más en la selección, de que para obtener el título de Sieger sea necesario provenir de, al menos, padre y madre con escuelas de trabajo.
A aquellas camadas que cumplían este requisito y que además contaban con los cuatro abuelos igualmente instruidos, es decir, dos generaciones con escuela, se les denominaba «crianza de trabajo» o de “selección” como se le llama hoy, y era algo muy tenido en cuenta ya en la calificación de los perros en las exposiciones y en la Siegerschau.
Hacía algunos años que en las Siegerschau se había instituido también una calificación, la de «Vorzüglich-Auslese» (VA), que se daba a aquellos ejemplares que, situados tras el Sieger o Campeón, poseían tan buenas cualidades como aquel mismo y destacaban a la cabeza del grupo de los «Vorzüglich o Excelentes».
La selección. Diferenciación por calidades, mejor comportamiento y performance general.
Con esto se pretendía, además de premiar merecidamente a esos ejemplares, ofrecer un abanico de sementales en la clase abierta machos, todos de extraordinarias cualidades y que por ello eran distinguidos con el VA. Así, esos perros se convertían en los “elegidos», los destacados como modelos para la continuidad y el futuro de la raza.
En esos años, finales de los cuarenta, jueces Prestigiosos como Walter Trox, Heinrich Klein, Fritz Hartung, Heinz Röiper, Werner Funk, etc… imponían su criterio brillantemene en sus juicios, con sus “rapports” agudos y, escuetos, y el SV se encontraba empeñado en un serio programa de mejora y dura selección.
Así el número de Ausleses y de Excelentes era muy limitado en las Siegerschaus, queriéndose significar de esa manera la rigurosa tarea selectiva que se estaba realizando. El grueso de los perros participantes obtenía la calificación de «Sehr Gut» o «Muy bueno».
ROLF v. OSNABRÜCKER LAND. Moldeando la historia del pastor alemán.
En la Sieger de Bremen de 1950, Katzmaier sitúa en la «Gebrauchshund-Klasse» (o Clase de Trabajo) machos, como VA4 a un perro que será clave en el futuro de la raza: ROLF v. OSNABRÜCKER LAND. El Juez Trox, en la abierta hembras, deja a su hermana de camada, RENA, VA3, y a su madre, MAJA Y. OSNABRÜCKER LAND, de ya seis años de edad, como VA7.
Al año siguiente, 1951, Katzmaier sufre una enfermedad y Trox le sustituye en el juicio de la clase magna, la clase abierta machos, consagrando a ROLF con el título de Sieger.
En 1952, Katzmaier sigue enfermo, y la junta Directiva de la SV nombra, insólitamente, a dos jueces para ocuparse de la clase abierta machos, conjunta y simultáneamente. Se trataba de Heinrich Klein y de Fritz Hartung. Sus juicios resultaron ciertamente controvertidos, y necesitaron de una amplia explicación, como prólogo de la relación de los perros analizados, en la «SV-Zeitung».
En realidad, estos dos jueces quisieron dejar patente en su actuación una tendencia, bastante extendida ya entre algunos criadores de entonces, a apartase de la «tipicidad» característica de la línea de «Rolf», para inclinarse por una esbeltez y estilización mayor que la del mesomorfismo que se producía a través de éste.
Se abrirá así un debate interno en el SV, que llegaría a convertirse en auténtica confrontación, entre los defensores del tipo «Rolf» y los partidarios de la estilización propuesta por Klein y Hartung con LIDO V. FRIEDLICHENHEIN como Sieger de 1952. Werner Funk juzgó aquel año la clase de trabajo hembras.
1953, Kaspar Katzmaier retorna al mando.
Kaspar Katzmaier goza de una cierta recuperación de su enfermedad y vuelve a ocuparse de la clase abierta machos, y Funk repite su actuación con las hembras. El Presidente, poco o nada contento con los juicios del año anterior, impone una drástica vuelta al orden anterior.
Al Sieger del 52, lo sitúa como 5º Excelente; al VA 5 del 51 lo retrocede al último de los Excelentes (V-14), y al V2 del año anterior lo deja V 12 a dos puestos de la «cola» de los excelentes.
Se acentúa con ello la polémica en el seno de la SV, y se vivirán tiempos de intentos de secesión y ruptura en el Club, proponiéndose que la clase abierta nunca más fuera juzgada por un sólo juez, sino que se confiara a todo un Comité de expertos, con lo que se ponía en tela de juicio al propio Presidente.
En esta difícil situación, Katzmaier volvía a recaer en su enfermedad, de la que ya no se recuperaría, y entonces la SV vive horas de fuerte lucha interna por ocupar la dirección de Club e imponer así cada cual los criterios de la corriente a la que se encontraba adepto.
Finalizaba la tercera etapa de la SV, la «Era Katzmaier».
El Sr.Presidente se veía obligado a abandonar la Presidencia en 1954 a causa de su enfermedad, aunque no fallecería hasta el 18 de abril de 1956.
Se caracterizó por su esfuerzo en la apertura de líneas, puesto que en su toma de posesión había recibido un panorama de tremenda concentración de la rama «estrella» de los 30, la nacida en KLODO V. BOXBERG.
Quiso descargar de consanguinidades la raza, dando paso en el grupo de Ausleses a ejemplares que provenían de líneas con orígenes en escalones muy anteriores, y que habían crecido paralelamente inéditas a la rama central de «Klodo» y de «Utz v. Haus Schütting».
Llegó a reabrir incluso una línea con origen en «Beowulf», que había conducido a «CLAUDIUS v. HAIN» y que tendría suma importancia, por ser depositaria de un firme carácter que se transmitió a través de ella.
Le tocó además vivir los años de guerra y dura postguerra, en la que debió ocuparse de recuperar la raza de sus muchas diezmas y de su escasa selección, y, en realidad, sólo dispuso de poco más de diez años de tiempo para realizar su labor presidencial.
Fue criticado por «tendente a la antigüedad» y por un talante poco abierto, pero debe reconocérsele su entrega, su coraje y su firme disposición por hacer lo que consideraba lo mejor para el futuro de la raza.
La postguerra. Sobrevivencia de la buena imagen de la raza.
El triste final de su etapa no fue en absoluto merecido para quien había sido, entre otras cosas, el artífice de la recuperación de la «buena imagen» del pastor alemán, tras la segunda Gran Guerra, en la que la raza fue denostada y hasta llamada maldita, a causa de los lógicos sentimientos antigermanos despertados en todo el mundo.
Pero dejaba, como hemos dicho antes, un Club dividido y con un ambiente muy controvertido, y aquí supo imponer su capacidad negociadora el Dr. Werner Funk, que se hizo con la Presidencia en las elecciones de 1956.
«WERNER FUNK» – LA CONSOLIDACIÓN DE LA SV.
Funk, cuarto presidente electo de la historia del Club, supo salvar con éxito ese difícil momento, cubriendo con gran criterio el período, del 56 al 71, en el que terminará de consolidar definitivamente la ya imponente estructura del Club.
Funk se ganó desde el primer momento la confianza de todos, consiguiendo que le fuese encomendado el juicio de la Abierta Machos desde la primera Sieger de su mandato presidencial, en la que debió realizar algunas concesiones y dar “una de cal y otra de arena” para satisfacer a los partidarios de una y otra corriente entonces enfrentadas, pero consiguiendo aplacar todos los ánimos.
En 1954 proclamó otra vez Sieger a Lido, aunque dejando entrever en el rapport una disconformidad contenida, a través de aquellas palabras: “Si a primera vista podría no dar la mejor impresión….”.
En 1955 ya era más dueño de la situación, y favorecido además por el excesivo refinamiento que se había dado en la descendencia de Lido, proclamó Sieger a Alf von Nordfelsen, un perro que puede decirse que fue una “apuesta personal” de Funk, y que sería clave en las líneas de futuro. Este y la descendencia de Rolf volverían a ocupar los primeros lugares de la Siegerschau de ahí en adelante.
En 1956, coincidiendo con la celebración del Campeonato Mundial de todas las razas de la FCI (Federation Cynologique International), surge un enfrentamiento entre la SV y la Sociedad Canina Alemana, la VDH.
La Sieger se ve obligada a adelantarse al mes de mayo, y la VDH pretendía además imponer una rglamentación sobre pruebas de trabajo que la SV no se mostró dispuesto a aceptar, amenazando con la baja de los 40.000 socios que estaban afiliados a la Sociedad Canina, y su paso a la UCI (Unión Cinológica Internacional), una sociedad escindida de la FCI, que luchaba entonces por imponerse a ella.
Funk, otra vez, se manifestó como hábil político, ganando aquel «pulso» a la VDH, y logrando que la SV fuese reconocido como una asociación completamente autónoma, con capacidad independiente para organizar sus pruebas y para la tenencia y llevaduría de su propio libro de orígenes de la raza.
La SV, una organización autónoma.
Tras este éxito, Funk se habrá afirmado notablemente en la Presidencia del Club, y ya desde el 57 tratará de imponer con todo empeño y fuerza su criterio. En la Sieger de Hamburgo de ese año concede, sólo 3 Ausieses y señala que es hora de realizar entre todos un esfuerzo mayor para aspirar a más altas metas; que el título de Auslese, ya sólo será concedido a los perros excepcionales, y emprende así una dura selección de los mejores que mantendrá en el futuro.
En ese año, 1957, Heinz Röper, del famoso afijo «Sieben Faulen», juzga la clase abierta hembras, pero después será Trox el que forme un perfecto dúo con Funk para dar en esta clase los más ajustados complementos a los machos destacados en la clase de trabajo, desde 1 958 hasta 1967.
Por entonces, además de la SV Siegerschau de estructura y la SV-Leistungsiegerschau de trabajo, se celebran todos los años la SV Diensthundeführer o Campeonato de Trabajo para las Fuerzas Armadas, y la SV-Preishüttensiegerschau, o Campeonato de Pastoreo.
1967. Empieza a dar frutos la semilla del Schutzhund.
Algunos de los Ausleses empiezan ya a aportar como méritos, además del KkI, 1ª, un SchH 111 y una FH (prueba especial de rastreo), y el mundo del trabajo y el de la belleza se entremezclan, viéndose algunos perros de trabajo destacados incluso con el título de Ausiese. El número de perros participantes en la clase abierta crece cada año, y, entre ellos, desciende notablemente el de los que no aportan una prueba de trabajo y la selección.
En 1964, un perro criado por el propio Werner Funk, ZIBU V. HAUS SCHÜTTING alcanza el título de Sieger, y es V1 un perro de trascendental proyección futura: LIDO V. D. WIENERAU, cuya hermana de camada, LANDA , será Siegerin al año siguiente, 1965.
«Lido» presentaba un defecto de pigmentación, con uñas claras, que le impidió entonces alcanzar el VA; además, no estaba exento de displasia, aunque éste no era aún un requisito imprescindible, puesto que se estaba iniciando prácticamente la investigación sobre esta enfermedad hereditaria, y el SV aún no había reglamentado nada al respecto.
Sin embargo, en estos años saltaba ya a la fama aquel afijo «Von der Wienerau», de Walter Martin. Al lado de Walter, un joven Hermann, hermano menor de éste, participaba de los primeros éxitos «Wienerau».
"Sólo puedo reproducir con los perros que tengo a mi disposición, es decir, sólo con mis hembras y los posibles machos.
Pero si la sangre no cabe, está bien la
suerte si resulta un perro superior".
Walter Martin
Zwinger von der Wienerau.
Y en aquel momento vuelve a surgir el problema de la tendencia a la «sobretalla».
En la Sieger del 65, Funk hace hincapié en esta dificultad que, periódicamente, surge con el pastor alemán. Quizá por un «gusto» de los aficionados por los imponentes machos con claros visos de “sobretipificación”, quizá por un código genético oculto que, de vez en cuando aparece lo cierto es que en la historia de la raza es algo recurrente y difícil de erradicar. Más cuando hay períodos en que se deja cierta “manga ancha» con esta característica, que luego debe volver a corregirse de forma un tanto enérgica.
La historia del pastor alemán suma el control radiológico de la displasia. (Voluntario).
En 1966, formaba parte ya de la junta de Crianza un hombre, el Dr. Christopher Rummel, que llegará después a presidir el Club. Preocupado y estudioso de la displasia de cadera, influirá entonces en la implantación del sistema de control radiológico de esta enfermedad, que se pondrá en marcha, a título voluntario en ese mismo año.
También en 1966, BODO V. LIERBERG es Auslese 7º, y en el 67 se proclama Sieger, con su hermano BERND V. LIEBERG como VA3. Estos dos perros serán el origen de una rama fundamental en el mundo del trabajo, transmitiendo un sólido carácter a su progenie.
1971 sería el último año de Werner Funk en la Presidenia de la SV. Hombre afable, de sutil ironía, astuto y capaz negociador y político, al que siempre le acompañó su poblado mostacho y su inseparable bastón, tocado con su sombrero de paño, llevó a la SV a la autonomía y a la independencia, consolidó su estructura, y supo aunar los esfuerzos de todos en una sola dirección, reafirmando el entramado social del Club, del que se hizo cargo en condiciones bastante difíciles.
Devolvió a la Presidencia aquel prestigio que corrió peligro en los últimos años de mandato de su antecesor, y llevó a la raza a la «modernidad», en el sentido de que «descubrió” a los perros» que han sido origen de las líneas de sangre que hoy tienen mayor vigencia, aunque quizá la “Era Funk» sea más recordada por el trascendental afianzamiento político que la SV logró en esos años.
«CHRISTOPHER RUMMEL” – LAS MODERNAS LINEAS DE SANGRE.
Las siguientes elecciones dentro del SV enfrentaron a dos personajes bien dispares: el Dr. Christopher Rummel, de la region de Vierheim, al Sur, y el Dr. Ernst Beck, de Wiebelskirchen, en Prusia, al Norte.
El primero con el afijo «von Aegidiendamm», que no había cosechado hasta entonces «sonados” éxitos, y el segundo con el de «Haus Beck», que había logrado dos títulos de Auslese en la etapa de Funk, al que le unía además una buena amistad.
Ganaría Rummel, en tanto que la masa social del Club pretendió acabar con aquel «imperio del Norte” de la época anterior, en la que los criadores septentrionales habían salido más favorecidos. El nuevo Presidente, por el contrario, haría de Vierheim esa «capital» del Pastor Alemán que fue a lo largo de muchos años.
La llegada de los hermanos Martin a la escena mundial en la historia del pastor alemán
Dos hermanos hasta ese momento no muy conocidos, los hermanos Martin, instalados allí, serían firmes aliados de Rummel en este propósito, a pesar de que, según parece, podría decirse que no existía demasiada afinidad o simpatía en las relaciones personales entre Rummel y Walter Martin.
Una de las constantes y principales preocupaciones de Rummel al frente del SV será la lucha contra las enfermedades de tipo hereditario que se estaban detectando en la raza. Entre ellas, la más importante, y a la que dedicó mayor atención fue la displasia de cadera.
Esta afección fue descrita por vez primera en 1936 por el Dr. Schnelle; en 1950 fue definida como enfermedad de origen primordialmente genético y la SV, por iniciativa de Rummel entonces miembro de la junta Directiva, fue pionero en el control radiológico de los animales afectados, que se impuso ya en 1966, mientras que la FCI no se ocuparía formalmente de este tema hasta 1974.
Dr. Wilhelm Brass – Director de los Servicios Técnicos Especiales de Displasia en la SV
Proveniente de Colonia, a la sazón profesor catedrático de Terapéutica General y Clínica de pequeños animales en la Facultad de Veterinaria de Hannover y Director de la Clínica de Pequeños Animales de la Escuela Superior de Veterinaria de Hannover, estudioso de esta enfermedad y muy experto en ella, es quien, desde entonces, ha ocupado el cargo de Director de los Servicios Técnicos Especiales de Displasia en la SV, responsabilizándose de la lectura y diagnóstico de las radiografías de cadera realizadas a ejemplares de todo el mundo.
Con la presidencia de Rummel se implantó también el tatuaje obligatorio en Alemania desde 1971, como medio de identificación y también como método auxiliar en esta batalla contra la displasia de cadera, de la que Rummel se declaró, desde un principio, como enemigo frontal.
1969. VA4 – Quanto v.o. Wienerau
La primera vez que juzgó la clase de trabajo machos en una Siegerschau este nuevo Presidente fue en el año 1969. En ella un perro del afijo «Wienerau» alcanzaba el título de Auslese; se trataba de QUANTO V.O. WIENERAU, clasificado VA4, que se convertiría en piedra angular para el desarrollo futuro de la raza.
El VA8 de ese mismo año fue FREI V.D. GUGGE , un ejemplar enteramente negro, que sería también fundamental en el porvenir de las lineas de trabajo, y al que se le podría objetar cierta falta de masculinidad, pero con un carácter extraordinariamente duro.
Quizá esté en este perro el origen de esa errónea leyenda que llevó a relacionar de forma equivocada el carácter con el color del manto en el pastor alemán.
Negros y grises. ¿Mejor carácter y temperamento? ¿Hechos reales o puro argumento comercial?.
Por aquella época se aseguraba que los perros negros, e incluso los grises, poseían mejor temperamento que los de pelo de diferente tonalidad. Hoy sabemos que esto no ocurre en realidad, pues existen perros negros y grises que han surgido por un “salto atrás” genético y que tienen problemas de estabilidad y firmeza de temperamento, igual que puede ocurrir con otros de distinto color, con sólidas demostraciones de carácter y un temperamento a toda prueba.
Sin embargo, durante un tiempo esa falsa “fama” que se les atribuyó contribuiría a que se realizaran entonces importaciones de los países de la Europa del Este (Checoslovaquia, Hungria, Polonia, etc), donde más abundaba ese tipo de manto, y que aprovechando la coyuntura “comercial” que suponía su compra a precios más asequibles para los occidentales, rindieron excesivos beneficios en su venta posterior en los países del oeste europeo.
Hoy el color negro completo, que es un caracter recesivo, parece casi erradicado de las líneas de estructura en las que predomina el negro y fuego, aunque como resultado de ésta percepción mayoritaria, puede hoy decirse que es cierto que buena parte de los mejores ejemplares de trabajo tienen esas capas de pelaje, aunque no todos, ni mucho menos, resultan aptos para el trabajo.
En una Alemania dividida. Negros y grises occidentales vs. Negros y grises del este.
No obstante, los negros o grises occidentales mantienen una anatomía general más próxima al Standard, mientras que los del Este han seguido una evolución muy distante y que, basada solamente en la utilidad, hace que quizás posean buena disposición para el trabajo, pero también puede que tengan una apariencia bastante poco ajustada al actual Standard de la raza.
La etapa de Rummel puede decirse que incrementó la separación entre las “líneas de belleza y las de trabajo”, distanciándose enormemente las dos tipologías. Rummel, como casi todos los criadores del Centro y Sur de Alemania se ocupaba más de la vertiente estructural y por el movimiento de los perros, aunque nunca obviando sus aptitudes caracteriológicas, pero lo cierto es que, desde entonces, las dos líneas de crianza se apartaron cada vez más una de otra.
Al poco tiempo de su posesión, Rummel dio un avance de los objetivos que se propondría alcanzar de reducción de la displasia y su estricto control, la investigación de la hemofilia que había asomado ya por entonces en algunos perros, la consecución de una mayor corrección estructural y mejor dinámica en el movimiento y el aumento de la sustancia, el dimorfismo sexual y la estabilidad del carácter.
1970. Irrumpe MUTZ V.D. PELZTIERFARM.
En la Siegerschau de 1970 comparece un perro pleno de sustancia, MUTZ V.D. PELZTIERFARM, procedente de la línea de ALF V. NORDFELSEN, del que era bisnieto, y que poseía un carácter seguro y contundente, así como una buena estructura general.
Era un perro propiedad del mismo Dr. Rummel, que cedería al italiano Danzio Gobbi, del afijo “dell ‘Alta Querzia” con la expresa condición de que debería permanecer en Alemania para poder ser aprovechado allí en la reproducción.
Se alzaría en esta ocasión con el título de Vicesieger, convirtiéndose de ahí en adelante en el origen de una moderna línea de sangre, utilizada sobre todo para mejorar el carácter, cualidad que solía transmitirse bien a través de ella.
MUTZ ha sido empleado tanto en la cría de estructura como en la de trabajo desde entonces con buenos resultados en ambas.
El VA5 de aquel año fue el ya mencionado QUANTO V.D. WIENERAU, fuerte y sustancioso, algo masivo, con muy buena cabeza y un color negro y fuego muy intenso. El noveno Auslese fue MARKO V. CELLERLAND, perro joven, procedente de otra línea diferente, que aportaba una cruz alta, muy buena línea dorsal y buena posición e inclinación de la grupa.
El siguiente año, 1971, MUTZ ya no se presentaría, QUANTO fue Vicesieger apoyado por un excelente grupo de reproducción, MARKO sería VA4, y aparecería en escena un nuevo “producto” Wienerau: CANTO V.D. VIENERAU, que resultó ser Excelente 1º (V1), quedándose así a las puertas del título de Auslese, como QUANTO se quedaba en las de Sieger.
V1 Canto von der Wienerau, una de las columnas en historia del pastor alemán
CANTO, que había obtenido sólo el Kkl2ª con el juez Fröschler, y que posteriormente el propio Rummel promocionaría al Kkl1ª, era un ejemplar completamente distinto a QUANTO, a pesar de tener ambos una cepa sanguínea común.
Poseía esa estructura más estilizada que antaño se había discutido en el seno del SV, aportando muy buenas angulaciones y sobre todo una muy buena grupa, que en QUANTO tendía a ser más inclinada de lo deseable.
Su criador el hábil y ya muy reconocido Walter Martin, supo “vender” al mundo entero el tipo CANTO, afirmando que este representaba la femineidad, complementaria a la masculinidad de QUANTO, abriendo así a sus dos perros todas las posibilidades para influir en la raza a través de su descendencia.
Posteriormente, el propio Walter iniciaría una campaña de descredito contra QUANTO, cedido a un criador italiano, promocionando más a CANTO como semental, que permanecía bajo su propiedad.
La década de los 70 se había iniciado así con cuatro “pilares” en los que se asentaría toda la crianza de aquellos años: MUTZ, CANTO, QUANTO y MARKO.
Al cabo de un tiempo, el Dr. Simon, juez especialista de la SV, descubrió la transmisión de hemofilia a través de CANTO, lo que motivó un auténtico revuelo en la cría, puesto que por entonces había cubierto ya muchas perras y la alarma cundió entre todos aquellos criadores que lo habían utilizado como semental.
Esto hizo que nuevamente surgiera una fuerte polémica dentro del Club, defendiendo unos a CANTO y atacando otros su empleo en la cría, en posturas claramente enfrentadas.
Lo cierto es que Rummel llegó a pedir entonces la evitación de consanguinidad sobre CANTO, con la sospecha de que se podrían dar casos de esta enfermedad en sus descendientes consanguíneos casi con toda seguridad.
Según muchos autores, hoy sí que parece demostrado que CANTO transmitió la hemofilia en algunos casos comprobados, aunque de cualquier manera, al morir con apenas cuatro años, sólo tuvo dos años para cubrir, lo que restó las posibilidades de propagar demasiado esa transmisión genética que se le había achacado y que en Alemania no se llegó a investigar en profundidad para comprobar la incidencia real que pudiera haber tenido.
A pesar de todo, CANTO aportó grandes cualidades a la crianza en el plano estructural, perpetuándose su línea de sangre a través de importantes perros hasta nuestros días.
Las cuatro líneas, MUTZ-QUANTO-CANTO-MARKO, se imponían en la cría de perros de estructura por aquel tiempo.
Mientras en el mundo del trabajo surgían dos perros de equiparable trascendencia futura en éste campo: el Leistungsieger de 1971, RACKER V. ITZAL, y el de 1974, ENNO V. ANTREFFTAL.
El primero hijo de PIROL V. KIRSCHENTAL, de ese mítico afijo que siempre se ha mantenido vigente en todas las disciplinas (trabajo, morfología y pastoreo), y el segundo descendiente del ya citado FREI V.D. GUGGE, aunque bastante distinto a él en apariencia.
Tanto ENNO como sus hermanas de camada dieron muy buenos ejemplares de trabajo.
En 1976 fue campeón un hijo de ENN, muy importante en la cría de líneas de trabajo, DRIGON V. FÜRMANNSHOF, conducido al igual que su padre por Fritz Bielher, y en 1978 otro hijo suyo, FALK V. EICHENDORFFSCHULE se alzaría con el mismo preciado título.
La representación de BERND V. LIERBERG
en esos años correría principalmente a cargo de su hija BETTY V. BONSDORF, doble campeona en el 68 y en el 72, perpetuándose también esta línea en la crianza de trabajo.
En la Siegerschau de pastoreo se imponía entonces Manfred Heyne con perros de su afijo “Von Stammherde Ramholz”. En 1967, 69 y 70 fue campeón NANDO V. STAMMHERDE RAMHOLZ; en el 72, 73 y 75 lo fue WITZ V, STAMMHERDE RAMHOLZ, y en el 76 lo sería EDO V, STAMMHERDE RAMHOLZ, todos siempre conducidos por el propio Heyne.
En 1976 fue cuando “Von Kirschental” irrumpió con éxito en el campeonato de pastoreo, con tres ejemplares que obtendrían la máxima calificación de excelente en esas labores: ARNULF, UVO Y URSA. Esta última hembra llegaría a ser campeona en 1978, conducida por su criador y propietario Karl Füller.
En la Siegerschau de estructura de los años 70 la sangre de los dos Wienerau, CANTO y QUANTO, se impondría claramente.
Hasta 34 Ausleses (21 machos y 13 hembras) serían descendientes de QUANTO, y 29 Ausleses (15 machos y 14 hembras) procederían de CANTO a lo largo de esa década, conformandose así un futuro de la raza cimentado en esas dos líneas de sangre que por entonces se cruzaban y entremezclaban hasta la saciedad, buscando unos resultados compendio de las virtudes de una y otra rama.
Ambos perros, como antes dijimos, tenían un pedigree bastante afín, a pesar de sus grandes diferencias fenotípicas. CANTO era hijo de LIANE V.D. WIENERAU, y QUANTO era nieto por línea materna de LIDO V.D. WIENERAU, hermano éste de camada de LIANE, y al que ya hemos dedicado algún comentario.
Además, por línea paterna los dos provenían de la cepa de ROLF V. OSNABRUCKER LAND en quinta generación, y ambos tenían también una consanguinidad en AXEL V. DININGHAUSER HEIDE, el padre de ALF V. NORDFELSEN, que les unía asimismo con la rama de MUTZ.
A lo largo de los siguientes años serían estas tres líneas, la de QUANTO, CANTO Y MUTZ, las que se consolidarían como definitorias del futuro Pastor Alemán, sucumbiendo la línea de MARKO V. CELLERLAND, que llegó a ser Sieger en 1972 con un buen grupo de reproducción, pero que en sucesivas generaciones no se pudo afianzar.
La comunidad de sangre, por otra parte, de esas tres ramas supervivientes dio lugar la más clara homogeneidad tipológica de la historia del pastor alemán.
Puede decirse que, a partir de entonces, se fijó el fenotipo característico de los pastores Alemanes que han llegado hasta nuestros días, bastante diferente del de los perros de los años 60, 50 y anteriores, y ello debe ser sin duda producto de la consanguinidad existente entre aquellos tres ejemplares.
Historia del pastor alemán. La internacionalización de la raza.
En los años 70 la raza se criaba ya de forma organizada y estructurada en casi todos los países europeos y en otros muchas más fuera del Viejo Continente.
Así, en Francia la Societeé Central du Berger Allemand (SCBA) se había constituído en 1920; en Holanda el Club Nacional (VDH) se fundó en 1934, en Italia la Societá Amatori Schäferhunde (SAS) se creó en 1956, etc.
Esto hizo que, ya en 1968 se instituyera una supra asociación de clubes de la raza, circunscrita en principio al ámbito europeo, la EUSV (Unión Europera de Clubes de Perro de Pastor Alemán).
Nace la Welt Union der Verein für Deutsche Schäferhunde (WUSV)
El 9 de septiembre de 1974, en Mannheim, y al día siguiente de la celebración de la Siegerschau de ese año, se formalizó la constitución de la Welt Union der Verein für Deutsche Schäferhunde (WUSV), que tendría su sede en Augsburg, junto a la de la SV, y cuyo presidente sería por unánime decisión el mismo presidente de la SV.
El objetivo perseguido con la creación de la WUSV era la unificación de los criterios selectivos y las normas de crianza en todos los países adscritos a ella.
Desde su creación se acordó celebrar una asamblea anual en el día posterior a la finalización de la Bunderssiegerschau, la Sieger de Alemania que, desde entonces, adquirió ese carácter de competición internacional, ya que cada vez serían más los perros procedentes de otros países que tomaran parte en ella.
A la vez se acordó organizar todos los años la “Welt Union Meisterschaft”, importantisima competición de trabajo, que congrega a los equipos nacionales con sus mejores perros y que es el magno certamen anual en el ámbito del trabajo, un campeonato internacional de campeones nacionales. Christopher Rummel sería, a la postre el primer Presidente de la WUSV, organización que él mismo procuró en todo momento potenciar.
Durante su etapa al frente de la SV, en la que el vicepresidente era Köster, la clase abierta hembras fue juzgada, sin embargo, por Albert Schneeloch, de Bonn, en un principio.
A partir de 1975, el joven hermano menor de Walter Martin, Hermann, se ocuparía de los juicios de las hembras, consolidando su posición dentro del Club, y constituyendo con el Presidente Rummel el tandem encargado de definir el tipo futuro de la raza.
Aquellos fueron años de “apertura al exterior”, pudiéndose ver entre los Ausleses perros y perras de crianza no alemana. Los productos de la cria italiana, por ejemplo, tuvieron entonces un merecido reconocimiento en la Siegerschau alemana.
“Casa Gatto”, “di Val del Tiépido” (afijo del famoso presidente de la SAS, Dr. Walter Gorrieri), “Von Frutteto”, alcanzarían un renombre internacional a través de los títulos de VA conseguidos en Alemania con perros de sus afijos.
Otros países también se verían igualmente recompensados en ese magno evento, antes reservado sólo a los perros alemanes, como puede ser el caso de Holanda que en 1972 conseguiría el VA3 para su perro KAZAN V. BENJORITOHOF, y en 1977 el VA10 para ZORRO V. MOLENAKKER, y también el caso de Suiza, que produjo al bellísimo y trascendental continuador de la línea de QUANTO (del que era hijo directo) LASSO DI VAL SOLE, que fue Auslese en 1976,77 y 79.
Se llegaba a principios de los 80. En la cría mundial se consolidaban las tres líneas de CANTO, QUANTO Y MUTZ, mientras que la de MARKO se desvanecía paulatinamente en una cada vez menos notoria descendencia.
QUANTO se perpetuaba principalmente a través de REZA V.D. WIENERAU (VA4 en el 72) LASO DI VAL SOLE (VA11 en el 76, VA13 en el 77 y VA5 en el 79), GUNDO V. KLOSTERBOGEN (VA8 en el 73, VA5 en el 74 y Sieger en el 75) y DICK V. ADELOGA (doble Sieger en el 73 y 74).
CANTO lo hacía, a su vez, a tavés de sus hijos DATSCHA V. PATERSWEG (VA6 en el 74 y VA4 en el 75), FREI V. HOLTKÄMPER SEE (VA7 en el 76), CANTO V. ARMINIUS (VA2 en el 74, VA11 en el 75, VA4 en el 76 y Sieger en el 78) y otros perros excelentes que darían una importante descendencia, como JAGO V.D. BAIERTALERSTRASSE y los hermanos de camada ASSLAND y ARGUS V. KLÄMMLE.
El primero que fue vendido a los EE.UU., tras haberse proclamado Sieger Joven, y el segundo que fue V2 en 1974. MUTZ, por su parte, contaría con ANDERL V. KLEINEN PFAHL (VA4 en el 74 y VA8 en el 75), HASSO V.D. GRÜNEN LATERNE (VA9 en el 72), WACKER V.D. EIRINGSBURG (VA3 en el 73 y VA5 en el 75).
Los hermanos JALK V.D. RHEINHALLE (VA7 en el 74 y VA9 en el 75) y JONNI V.D. RHEINHALLE (V1 en el 73, y que no alcanzó el auslese por la falta de un premolar), y otros más excelentes como DITO V. KURPFALZHALLE, BRINO DELL ‘ALTA QUERZIA, AXEL V. GRÜNDEL, QUINO V.MÖNCHBERG, o el duro JORI V.D. GRONE.
Estas tres líneas se combinaban constantemente entre sí, buscando siempre la compensación y la complementariedad.
a- La tipicidad, el color, la masividad, masculinidad y las buenas cabezas de QUANTO
b- La sustancia, la fuerza y el carácter de MUTZ,.
c- La mejor cruz, grupa y angulaciones posteriores de CANTO.
A principios de los 80, Rummel comenzaría a preparar su relevo por Hermann Martin, al que él mismo había llevado de la mano aquellos años antes, y que entonces ya ocupaba la vicepresidencia del Club.
Hermann Martin, notario de profesión, que como criador había cosechado grandes éxitos, como un título de Siegerin joven en 1975 con HEXE V. ARMINIUS (hija de Dick V. Adeloga), tres veces el título de Auslese, y por fin Sieger a la cuarta en 1978, con CANTO V. ARMINIUS, o un tercer puesto en la clase jóvenes del 7 con PIROL V. ARMINIUS (hijo de Cliff V. Hausbeck que, a su vez, era hijo de QUANTO).
Pero hasta 1982 será todavía Rummel el Presidente del SV y el encargado de los juicios de la clase abierta machos de la Siegerschau y el que dirija, por lo tanto, el futuro de la raza.
Hasta ese momento, el más impactante evento en la historia del pastor alemán ocurrió el 6 de febrero de 1979.
Ese día nació en casa de Martin Göbl, en Wilsteig, una camada (la “P” de su afijo “Vom Wildsteiger Land”), que marcará un hito en la historia del pastor alemán, pues de ella formará parte una perra, PALME VOM WILDSTEIGER LAND, destinada a constituirse en pieza clave de los destinos de la raza a partir de entonces.
PALME era hija de NICK V.D. WIENERAU, que procedía por línea paterna de KUNO V. WEIDTWEG y de JONNY V.D. RHEINHALLE, incorporando así la línea MUTZ, y por línea materna era hijo de la gran reproductora FLORA V. KÖNIGSBRUCH, hija ésta de CANTO y la también excelente procreadora WILMA V.D. KISSELSCHLUCHT.
La madre de PALME era FINA V. BADSEE, VA5 en el 79, producto de la combinación CANTO-QUANTO; CANTO a través de su padre VEIT V. HAUSKÖDER y el padre de éste ASSLAND V. KLÄMMLE, que era hijo de CANTO; y QUANTO a través de su madre WALA V. STURMWOLKE, hija ésta del sieger de 1975 GUNDO V. KLOSTERBOGEN, el cual era hijo directo de QUANTO.
Procedía PALME de una compensada combinación de las tres líneas MUTZ-CANTO-QUANTO, aunque con una consanguinidad 3-4 sobre CANTO.
Palme no tendría mucho éxito en las exposiciones, pero su hermana PERLE si conseguiría el brillo, llegando a ser Siegerin en 1982. Pero sin embargo tendría una descendencia que sería definitiva en adelante, como veremos, para la historia del pastor alemán.
Su influencia en la crianza y en la propia raza ha sido tan importante que hoy es realmente difícil encontrar un perro de pastor alemán que no cuente entre sus antepasados con ella.
Todo empezó cuando Martin Göbl, queriendo sin duda equilibrar la consanguinidad sobre CANTO de PALME, la cruzó a principios de 1981 con un representante de la línea QUANTO, IRK V. ARMINIUS, bisnieto de aquel a través de PIROL V. ARMINIUS y CLIFF V. HAUSBECK.
El resultado fue una camada, la “U” Vom Wildsteiger Land, de importancia fundamental en el posterior desarrollo de la raza, y que vino al mundo el 12 de marzo de 1981.
Al celo siguiente, PALME es cedida por Göbl al propio Hermann Martin, que realizará un cruce similar al anterior cubriéndola con XAVER V. ARMINIUS nieto de QUANTO a través de LASO DI VAL SOLE.
El resultado de este nuevo cruce de PALME con XAVER vuelve a ser una camada, la “Q V. Arminius” que tendrá tanta o quizás mayor trascendencia que la anterior.
Entre ambas se va a configurar un nuevo tipo de pastor alemán, el tipo característico del actual pastor alemán, con notables diferencias con el de los años 70 y anteriores.
La entera “responsabilidad” de esa evolución hay que buscarla en PALME V. WILDSTEIGER LAND, claro está, y también en el que será próximo presidente del SV, Hermann Martin, que apostará de forma decidida por la descendencia de ésta.
Tras 14 años, llega el retiro de Rummel y la llegada de Hermann Martin.
Será el año 1982, Christopher Rummel abandonaba el cargo de presidente, tras 14 años al frente del Club, y en su lugar será elegido Hermann Martin, que desde 1974 ocupaba el puesto de Comisario de Cría en la Ejecutiva de la SV. Iniciaría una nueva era para la historia del pastor alemán
Terminaba Rummel su etapa con un importante inventario de logros conseguidos en cuanto al impulso dado a la crianza y a la expansión de la raza.
De los 40.000 de 1968 se había pasado a más de 83.000 en 1982, y la SV gozaba de plena estabilidad política y organizativa. Desde su papel también como Vicepresidente de la VDH (Sociedad Canina Alemana de todas las Razas), cargo en el que había permanecido desde 1970, Rummel había conseguido mantener la armonía entre las dos instituciones en otro tiempo enfrentadas.
En el plano de la política exterior del Club, uno de sus principales méritos fue la constitución de la WUSV,
Si a Von Stephanitz se debió el reconocimiento y la fama universal del Pastor Alemán, a Rummel hay que atribuirle el ordenamiento internacional de su crianza.
Empresario de éxito, a nivel profesional y particular Rummel había sido condecorado por el Gobierno Federal por su labor como presidente de la Asociación de Empresarios de la Industria de la Madera.
La muerte le sobrevino tres años después de abandonar la Presidencia del AV, en mayo de 1985, celebrándose entonces unos funerales en su honor a los que acudirían a rendirle homenaje muchas personalidades y destacadas figuras en el mundo del Pastor Alemán.
«HERMANN MARTIN”. LA HOMOGENIZACION DEL TIPO.
El menor de los hermanos Martin, aquel que se asomó al ámbito del Pastor Alemán como auxiliar de su famoso hermano, y tuvo sus primeras actuaciones en los rings como presentador de perros «Wienerau», había cursado la carrera de Derecho y era ya notario en Vierheim; pero la historia del pastor alemán le ofrecería muchos más laureles.
Contaba entonces con 45 años de edad y dentro de la SV. había realizado una «carrera» metódica. Socio desde 1962, tenía su afijo «von Arminius» desde 1972.
Antes, en 1970, había sido designado juez especialista de la raza, y en 1974 ocupaba ya el cargo de Comisario de Cría del Club, nombrándosele «Körmeister» en 1975 y siendo el encargado de enjuiciar la clase de trabajo hembras de la Siegerschau desde aquel mismo año.
La Presidencia del Club Por Hermann Martin: un proyecto nuevo:
La homogeneización del «tipo» del perro de Pastor Alemán, la unificación de la apariencia externa de la raza, con ya más de ochenta años de existencia, y que aún mantenía una diversidad y multiplicidad de fenotipos.
Tras su posesión de su nuevo cargo, Hermann Martin juzgaría por primera vez la clase abierta machos en la Siegerschau de 1983, auxiliado del Dr. Ernst Beck en la homónima clase hembras.
Concederá un total de once títulos de Auslese, en los que predominaría la línea Canto, aunque dió entrada en este grupo a un joven Uran von Wildsteiger Land, procedente de aquella camada «U» que antes comentábamos, que ocupó entonces el VA3. «Uran», que el año anterior había sido también cabeza de la clase jóvenes, era hijo de Palme, la hermana de la Siegerin de 1982 Perle V. Wildsteiger Land, juzgada entonces por el mismo Martin, que apostaba decididamente por este perro.
2X VA1 Uran vom Wildsteiger Land
«Uran» respondía a ese tipo que Hermann tenía previsto imponer, y toda la afición secundaría su proyecto, transformando a este ejemplar en un auténtico «monstruo» de la reproducción, que ya desde 1.984 presentó los grupos de reproductor más numerosos de la Siegerschau, con un récord en 1.986 de casi 100 hijos.
Su hermana de camada «Ulme v.Wildsteiger Land» conseguiría el VA 8 en 1.984 y el título de Siegerin en 1.985, sirviendo también de apoyo a su prolífico hermano, que en esos dos años se proclamó Sieger absoluto de la clase de Trabajo machos.
El legado de Uran supone la transición de las líneas «antiguas» a las «modernas». Fijó en su descendencia una buena línea dorsal, muy buenas proporciones y angulaciones, una excelente grupa y, ante todo, contribuyó notablemente a la «normalización» de las caderas, produciendo ejemplares totalmente libres de la temida displasia.
Como única objeción quizá cabría imputarle la transmisión de un menos atractivo manto negro, heredado de su abuela materna Fina v. Badsee, que perdía la forma característica de «silla de montar» sobre los costados, trocándose en una nítida franja horizontal menos estética y que, con el tiempo, además iba disminuyendo, de forma tal, que, en algunos casos, llegaba a desaparecer casi ese color negro sobre el lomo y los costados.
Quando v. Arminius y su influencia en la historia del pastor alemán
Pero si este doble Sieger del 84 y 85 ha sido trascendental en el desarrollo posterior de la raza, no lo sería menos el que lo sucedió. En 1986 y en 1987 el vencedor de la clase abierta machos será Quando v. Arminius, un hermano de madre de «Uran», como antes dijimos, pero que era el depositario de casi todos los atributos que a su abuelo paterno, Lasso di Val Sole, y que también se consagraría como serio continuador de la línea de Quanto, su bisabuelo.
Estructuralmente, acaso, algo inferior que «Uran», sobre todo en lo referente a la posición e inclinación de la grupa, aportará, sin embargo, mucha mayor tipicidad y masculinidad, mejores cabezas, mucho mejor color y pigmentación, y con un manto negro, entero e intenso, que será capaz de transmitir a su descendencia.
La inolvidable camada «Q»: Quino, Queno, Quindo, Quana, Quena, Quina y Quitta
«Quando» se vió apoyado también por un importante grupo de progenie desde sus comienzos y por unos excelentes hermanos de camada (Quino, Queno, Quindo, Quana, Quena, Quina y Quitta), que ejercieron, respectivamente, una sobresaliente influencia en la cría y en la fijación de ese tipo particular, denominado desde entonces «tipo Quando».
En 1987 la historia del pastor alemán tuvo grandes acontecimientos; irrumpieron en la clase abierta tres imponentes hijos de este perro, Iso v. Bergmannshof, Odin v. Tannenmeise y Enzo v.d. Burg Aliso, los dos primeros galardonados con el título de Auslese, y el tercero Excelente de punta, quizá también porque hubiera sido demasiado incluir tres hijos de «Quando» entre los VA de ese año, ya que cualidades tampoco le faltaban a «Enzo» para haberlo sido.
Desde ese momento se vería sólidamente asegurada la continuidad de «Quando». «Uran», por su parte, había dado origen a un ejemplar de excepción:
Eiko v. Kirschental (VA3 en el 86, VA2 en el 87 y Sieger en el 88.
Aunque era un producto equilibrado (5-3) Quanto y (5-4) Canto, poseía una tipicidad más cercana a la línea de su madre Xitta v. Kirschental hija de «Lasso di Val Sole».
También tuvo cabida entre los Ausleses de esos tiempos otro hijo de «Uran», Yambo v. Wildsteiger land, muy bueno estructuralmente, aunque con no tan buena posición de la grupa como su padre, y con un muy escaso manto negro en su pelaje.
Ahora bien, con la descedencia femenina de «Uran», sería un caso aparte. En esa década de los ochenta la clase de trabajo hembras tendrá más protagonistas de excepción las hijas de «Uran»: Palme v. Bad-Boll (VA3 en el 86 y VA2 en el 87), Ulme v. Haus Dexel (VA5 en el 87 y VA4 en el 88), Ronda v. Haus Beck (Siegerin en el 88), Uta v. Batu (VA3 en el 88 y VA3 en el 89), Tilka v. Haus Beck (VA7 en el 89) y muchas más excelentes «de punta» coparon siempre los primeros puestos de la Siegerschau, dando muestra de su extraordinaria categoría.
En Francia, muy especialmente, «Uran» causó furor seleccionándose como reproductoras hijas suyas que hicieron subir espectacularmente el nivel de cría en el vecino país. Un hijo suyo nacido allí, Aurasi du Val D’Anzin, con el cual diera inicio la gran historia historia del pastor alemán del afijo du Val D’Anzin, consiguió un destacado puesto de Excelente en Alemania, fue también el encargado de perpetuar a «Uran» en la cría francesa.
En Alemania, el soporte de esa continuidad por vía paterna recayó en el magnífico Eiko v. Kirschental.
historia del pastor alemán
La línea de Mutz en los 80 se sustentó en la descendencia de Jony v.d. Rheinhalle, principalmente a través de su hijo Jupp v.d. Haller Farm.
Éste dió lugar a Natz v. Hasenborn, cuatro veces Auslese en el 83, 84, 85 y 86, y a Putz v. Arkjakjo, V1 en 1983, sin entrar en el grupo de Ausleses por la falta de pruebas de trabajo en su abuela Granny v. Twentebloed, pero a quien el coraje de su propietario le llevó a conseguir más tarde el VA en el 84 y en el 85, tras realizar el esfuerzo de sacar esas pruebas a aquella perra, ya con casi nueve años de edad.
La otra rama próspera de Mutz para impactar materialmente historia del pastor alemán, se decantó en la descendencia de su hijo Kuno v. Weitweg, que a través del padre de «Palme», Nick v.d. Wienerau, dio lugar a Kim v.d. Michallwiese, y éste a Fando v. Südblick, de origen holandés, que fue VA8 en el 88 y en el 89, proporcionando otra rama alternativa de esta cepa Mutz.
Canto se vería asimismo representado en la cría con muchos ejemplares Ausleses como Yoll y Vango v. Adeloga, Apoll v. Haus Tigges, Kanto v. Konigsträssle, Quarz v. Holtkämper See, Zasko v. Mönchberg, Valk v. Michelstädter Rathaus, Dingo v. Haus Gero y Onex v. Batu. Las líneas de trabajo, por su parte, se siguieron asentando en las ramas surgidas de Bernd y Bodo v. Lieberg; de Frei v.d. Gugge, su hijo Enno v. Antrefftal y su nieto Drigon v. Fürmannshof; en la de Racker v. Itzal y en la de la extraordinaria reproductora Quicke v. Itzal, hermana de la madre de «Racker».
Mientras, en la historia del pastor alemán de trabajo…
En la RFA, un afijo, dentro de las líneas de trabajo, se hacía con un renombre similar a «Wienerau» en la belleza, «von Bungalow». Especializado en las líneas de perros de trabajo desde los años sesenta, producía ejemplares de extraordinario valor para la competición y más para la crianza, con varias generaciones de perros de su propio afijo, a la manera de «Trienzbachtal» en la cría de perros de estructura, consiguiendo la continuidad de «sus propias» líneas.
Muchos otros criadores eran los que cubrían con sementales y se hacían también con hembras «von Bungalow» para la cría. Actualmente, una buena parte de los perros mejor clasificados en los campeonatos de trabajo tienen en su pedigree perros de este mítico afijo: Nanouc, Conny, Horby, Viper, Matsch, Mike, Acco, Boa, Bebe, Rina, Umsa, Kad, Senta, Jaja, la magnifica reproductora Pali v. Bungalow, etc. son algunos de los que mayor trascendencia han tenido.
De la misma manera, al otro lado de la “cortina de hierro”, en la RDA, «von Glockeneck» jugaba también un papel similar, originando ejemplares de extraordinaria utilidad que incluso se importaban a la RFA, o a los que se acudía desde allí para cubrir hembras.
Unos de los más importantes perros de aquel afijo ha sido Pascha v. Glockeneck, bisnieto de «Bernd» a través de Pushkass v. Haus Himpel y de Falk v.d. Gundorfer Höhe, ambos nacidos también en la Alemania del Este. Esa es La historia paralela del pastor alemán de trabajo, que tantos seguidores atesora.
Otro de los grandes perros de trabajo de aquella época fue Greif zum Lahntal, quien también trazaría su indeleble marca en las generaciones futuras. Muchos ejemplares de estructura fueron también utilizados en la cría de trabajo, buscando la mejora anatómica y obteniendo muchas veces buenos resultados.
La línea Mutz se «lleva la palma» en ese tipo de combinaciones, pero también otros perros de otras procedencias han sido utilizados en ocasiones con éxito.
El Auslese Hero v. Lauerhof, por ejemplo, se cuenta hoy entre los ascendientes de importantes perros de trabajo, a pesar de provenir de una línea, la de Jupp v.d. Murrenhütte y Klodo v.d. Eremithenklause, que no se caracterizaba por tener temperamentos firmes. Esa es la historia para el pastor alemán de trabajo.
También Canto, Quanto y hasta Marko están entre los antecesores de perros de trabajo que seguramente han podido obtener el Körung de 1ª gracias a esa compensación morfológica introducida en su día en sus líneas de sangre.
También por entonces no era infrecuente la incursión de afijos, más centrados en las líneas de estructura, en el mundo del trabajo. Al ya mencionado «von Kirschental» hay que sumar otros como «Schwarzen Zwinger», «Kreuzbaum», «Neffetal», etc., e incluso otros aún más característicos por la cría de belleza como «Bergmannshof», Haus Beck», e incluso algún «Wienerau», sólo por poner ejemplos bien conocidos.
Hermann Martin y la oposición.
La historia del pastor alemán no estuvo libre de obstáculos. Pasado un tiempo desde el inicio de su presidencia, Hermman vió surgir algunas corrientes opuestas a él. En 1987 y 1988 algunas voces empezaron a elevarse contra su persona, entre otras cosas porque la mayor parte de los Ausleses que se habían designado en ese tiempo eran o procedían de su propio afijo «von Arminius».
Fue criticado por ello y comenzaron a aumentar el número de ausencias y de deserciones en la clase abierta machos de la Siegerschau, lo que llegó a preocupar seriamente a la Junta Directiva de la S.V. mientras los detractores de Martin propagaban una imagen suya egoísta y oportunista.
En 1987 el juez Dr. Simon, aquel que años antes protagonizara la polémica en cuanto a la transmisión hemofílica de Canto, volvió a saltar al primer plano de la controversia.
Esta vez como consecuencia de su pública denuncia de una presunta malformación de la boca del ya entonces doble Sieger «Quando v. Arminius», descubierta precisamente a través de una fotografía suya publicada en la mismisima «SV-Zeitung», la revista del S.V.
En esa fotografía se podía observar un anómalo alineamiento de los incisivos inferiores del perro. En su defensa, Martin arguyó que él no había señalado este leve defecto en sus rapports porque tampoco ningún otro juez lo había advertido nunca. Convenció tan poco su explicación que se desataron otra vez en el seno de la SV los enfrentamientos y las disensiones.
Riesgo de cisma dentro del Club.
Se habló en algunos casos de una «trama» conspiradora en contra del Presidente, y se volvió a correr incluso el riesgo de cisma dentro del club, promovido por la oposición a Hermann, quien estuvo a punto de dimitir por las fuertes presiones a que entonces se vió sometido.
Finalmente, la Junta Directiva acordó tomar unas decisiones que apaciguaran un poco los ánimos y la historia del pastor alemán continuara sin tanto tropiezo político. Primero se convocó a la Comisión de Cría de la SV, para que examinara a «Quando», y tras ello se hizo público un comunicado con el dictamen de ésta, asegurando que el perro estaba libre de todo defecto en su dentadura.
Se encendieron entonces aún más las inquinas entre los recelosos con la política del Presidente, pues la referida fotografía mostraba con toda evidencia la existencia de una anomalía, y así la Junta Directiva se veía obligada a recurrir y solicitar un diagnóstico objetivo de un prestigioso experto alemán.
¿Y qué ocurrió?
Esta vez el resultado de esa prueba pericial fue la apreciación de que dos piezas dentales de los cuatro incisivos inferiores estaban efectivamente adelantados o «salidos hacia afuera» aunque se añadía que podía achacarse posiblemente a la edad del animal en aquel momento.
Lo cierto es que según algunos autores, «Quando» presentó realmente ese defecto en su dentadura, el cual, además, se pudo apreciar con posterioridad en algunos de sus descendientes.
Al poco tiempo de esta «marejada” en la historia del pastor alemán, cedieron aquellas corrientes divisionistas y la SV recuperó su estabilidad, con un Hermann Martin totalmente afianzado en la Presidencia, aunque habrá de pasar más de un lustro para que otro «von Arminius» ocupe un puesto entre los Ausleses, aplacándose así las críticas que en ese aspecto surgieron contra él.
En relación a «Quando», la tremenda calidad de sus descendientes acallaría por completo las voces que se levantaron contra él.
En 1989 el pronóstico falló. Eiko v. Kirschental, favorito para revalidar su corona de Sieger, no se presentó en plenitud de forma, viéndose relegado al tercer puesto, y Hermann dió la oportunidad a un hijo de «Quando», Iso v. Bergmannshof, el cual después no pudo aprovecharla a través de una firme descendencia. La historia del pastor alemán sigue su curso.
Fanto v. Hirschel, el último de los Canto «puros», sería Vicesieger. En cuarta posición se situaría Mark v. Haus Beck, hijo del discutido Fedor v. Arminius, muy superior a su padre en todo y que también por línea materna incorporaba «sangre Q» al ser hijo de «Quina». Quinto y sexto fueron dos representantes de la linea «Quanto» provenientes de la rama «particular» de Leopold Bucher, la «Trienzbachtal».
Se trataba de Don v. Lennefetal y Jack v. Trienzbachtal. Con «Jack», Bucher consolidaba su propia línea de Quanto, la llamada desde entonces «línea Trienzbachtal», con ya cuatro generaciones de perros criados por él descendientes de Quanto. La historia de un pastor alemán excepcional.
Cerrando el grupo de Ausleses de ese año estaban Zamb v.d. Wienerau, Fando v. Südblick y Jeck v. Noricum. «Zamb» y «Jeck» eran dos jóvenes hijos del arquetipo Odin v. Tannenmeise, el otro hijo de Quando que fue «sacrificado» al protagonismo de su hermano «Iso v. Bergmannshof» como continuador proclamado oficialmente de la línea paterna de Quando.
«Odin» nacido en Holanda, fue un perro de una belleza impactante. Fue Sieger Joven en 1986, noveno y último Auslese en el 87 y VA6 en 1988. No alcanzaría mejores clasificaciones a causa de la falta de espíritu en el ring que quizá le hiciera moverse un tanto pesadamente, pero tenía una construcción ideal, una impresionante cabeza, un color envidiable y un sólido carácter heredado de su procedencia materna de Mutz.
Grande, fuerte, algo masivo, atraía siempre la atención en las exposiciones en que se presentó. Pero creemos sinceramente que «Odin», como su bisabuelo «Lasso di Val Sole» en otra época, no fue tratado justamente, ya que, a falta de otra cosa que reprocharle, se recurrió a penalizar fuertemente su «falta de ganas» en el movimiento sobre el ring.
Esos aspectos reprochables en Odin, se le «perdonaron» más tarde a su hijo «Jeck v. Noricum», que se proclamó Sieger en 1993″. Además, «Odin» fue severamente sancionado por realizar más de las 60 montas permitidas en el año 1988, algo que quizás a otros no se les ha «investigado» tan a fondo.
Probablemente por ello, fue vendido a Japón, al parecer por una cifra récord entonces, pero dejando sin la posibilidad de cubrir con él a muchos criadores europeos ansiosos de haberlo hecho.
No obstante, a Theodor Lugbauer y Walter Martin no se les «escapó», y de él obtuvieron los mejores perros de su vida y los mayores éxitos para sus respectivos afijos, «von Noricum» y «von Wienerau». «Odin», más tarde, volvería a recomprarse en Alemania, donde tuvo ocasión, otra vez, de realizar las últimas montas de su vida, que dieron lugar a extraordinarias camadas de los criadores que confiaron en él.
La década de los 90, interesantísima.
Iniciaba, con una línea Quanto desdoblada en tres ramas, la de «Uran», la de «Quando» y la de «Gundo». Por otra parte, Canto estaba representado por «Mark v. Haus Beck» y «Fanto v. Hirschel», principalmente, y Mutz continua su línea a través de «Natz v. Hasenborn» y «Fando v. Südblick», ya que la tercera rama de «Karo v. Asbacher Land» no daría unos frutos demasiado destacados.
«Natz v. Hasenborn» a su vez, sólo tuvo continuidad por medio de su hijo «Cello v. Römerau», resultado de su unión con «Quana v. Arminius».
El panorama, en los albores de los noventa para el pastor alemán y su historia, era pues de una absoluta convergencia de sangres en la camada «Q v. Arminius», ya que las líneas más relevantes eran: la del propio «Quando» como continuador de Quanto; «Mark v. Haus Beck», hijo de «Quina» y siguiendo a Canto; y la de «Cello v.d. Römerau», hijo de «Quana» y representando a Mutz.
historia del pastor alemán
Se «difuminaba» así La historia del pastor alemán con la tricotomía de las tres líneas clásicas anteriores, que se acentuó aún más con la continuidad de «Uran» a través de su nieto «Yago v. Wildsteiger Land», fruto de la unión de «Eiko v. Kirschental» también con «Quina v. Arminius».
El intrincado plantel de Ausleses de los noventa, que cierran todas sus líneas en aquella camada «Q», es el auténtico responsable de que, a partir de su aparición en la escena de la crianza, se haya producido la mayor homogeneidad fenotípica de esta raza en toda su historia.
Algo que quizá Hermann Martin concibió tiempo atrás como un objetivo a alcanzar y que, sin ninguna duda, supo llegar a conseguir. Pero, para lograr esa muy cercana apariencia de todos los perros actuales, se había recurrido a una cría endogámica otra vez, a unos cruces con muy próximas consanguinidades, que todavía no sabemos exactamente si tendrán unos «efectos secundarios» indeseados.
Epoca de endogamia que empieza a preocupar, pero también a generar soluciones.
El riesgo se irá disipando, sin duda, a medida que transcurran las generaciones en la historia del pastor alemán, siempre y cuando no se siga insistiendo en la cría consanguínea nuevamente, claro está.
Esta semejanza morfológica nunca antes vista, de casi todos los Pastores Alemanes actuales de líneas de estructura, con su cara y su posible cruz, es uno de los principales méritos que hay que atribuir a la etapa presidencial de Hermann Martin.
En lo referente a la evolución de la raza en la historia del pastor alemán, el máximo exponente sea, quizás, aquel «dream team», aquel flamante grupo de cría con el que Walter Martin ganaba esa clase en la Siegerschau de Düsseldorf en 1992, en la que la homogeneidad fenotípica de aquellos seis ejemplares que lo constituían era extraordinaria.
Tiempo de balances positivos y una nueva generación que llega.
Desde aquel entonces hasta ahora, en lo que va de esta última década del siglo XX, podemos decir que se ha impuesto claramente, con Hermann, la línea Quanto.
En estos años, hasta 1996, la línea Mutz ha dado un total de cuatro machos que han conseguido tres veces el título de Auslese, y siete hembras con nueve títulos. Mutz, muy bien insertado, podrá moldear también pronto la historia de la raza pastor alemán y ser más determinante en el desarrollo de la crianza.
La línea Canto ha dado ocho machos veinte veces Ausleses y dieciséis hembras veinte veces Ausleses también.
Por su parte, la línea de Quanto ha estado representada por catorce machos con treinta y dos títulos de Ausleses y diecinueve hembras veintisiete veces Ausleses, entre ellos cuatro Siegers y siete Siegerinas, es decir, todos los años de esta década ha sido Siegerin una perra de esta línea.
En la historia del pastor alemán por la ruta de las líneas de trabajo parece advertirse un tímido acercamiento hacia la mejora estructural, aunque existe aún un abismo entre ambas tendencias selectivas de la raza, mientras que en las líneas de estructura comienzan a valorarse primordialmente más las actitudes que las aptitudes del perro.
«PETER MESSLER”. LA GLOBALIZACIÓN DE LA RAZA.
La «etapa Martin» acabó en 1994 cuando no se presento a la reelección, ocupando desde entonces la Presidencia de la SV el Sr. Peter Messler, criador con el afijo «von Tronje», no demasiado conocido en aquel tiempo.
Sin embargo Hermann Martin siguió al frente de la WUSV y ostentando el título de Presidente de Honor de la SV hasta su muerte en el mes de septiembre de 1996, pocos días después de la Siegerschau de Karlsrühe y casi coincidiendo, por escasas fechas, con la desaparición también de su hermano Walter, fallecido poco antes de esa Sieger.
Trágica concurrencia que, en parte, ha servido para incrementar la leyenda de estos dos míticos personajes del mundo y de la historia del pastor alemán
En la presidencia de la WUSV, desde 1985 hasta su muerte, Hermann Martin llevó a cabo una gran actividad impulsadora de esta Asociación.
De los 38 países que la componían en el 85, consiguió pasar a 66 naciones asociadas, constituídas por un total de 450.000 personas afiliadas en todo el mundo. Una expansión que, por su tremenda magnitud, no necesita siquiera de ningún comentario añadido.
La SV por su parte, aumento de los 83.000 socios de la etapa de Rummel a una cifra próxima a los 120.000, aunque buena parte de este incremento se debió al proceso de la unificación de las dos Alemanias tras la caída del muro de Berlín, algo que obligó a la reestructuración del Club para acoger a la afición del Este que se incorporaba a la nueva estructura social conjunta, lo cual fue también una responsabilidad para Martin. La historia del pastor alemán, ligada a la historia del mundo.
Desde 1992, Hermann ocupó, como antes lo había hecho su predecesor Rummel, la vicepresidencia de la V.D.H., y desde ese cargo estrechó las relaciones entre las dos instituciones caninas germanas, iniciando también un acercamiento entre las instancias homólogas a nivel internacional, la WUSV y la FCI.
Hermann Martin se ha consagrado finalmente como una de las más importantes figuras en la historia de la SV, con una más que meritoria labor a lo largo de su mandato, lo que hoy le ha valido un reconocimiento unánime y un respeto universal, llevándolo a «los altares» de esta institución.
La historia del pastor alemán, un camino de gran éxito comercial.
La raza más extendida en el mundo continúa hoy su trasegar con un incansable paso de trotador, con crecimientos inusitados en algunos países orientales principalmente, con alto poder adquisitivo, que “compran” la más alta calidad en Alemania y la llevan a su territorio con el fin de consolidar, aún sin un éxito connotado, su trabajo en la crianza.
El pastor alenán sigue adelante con una apertura tímida aún, pero notoria hacia otras latitudes de las cuales se extraen hoy grandes ejemplares con fines de crianza selectiva y son adoptados con beneplácito no sólo en algunos países europeos, sino también en la mismísima Alemania.
La raza avanza, no sin el peso de amenazas tangibles en el campo político, al no haber mitigado oportunamente la división persistente entre la estructura y el trabajo.
Si bien es cierto que este conflicto persiste, la actividad de crianza, trabajo y deporte es de grandes magnitudes en todo el orbe, con un prometedor incremento de la participación internacional, en la cual se nota un crecimiento de la importancia de la raza en países como España, Holanda, Italia, y en países latinoamericanos como Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y la importantísima actividad que se vive en Argentina, con una de las mayores y más prometedoras actividades pastoreras en el mundo hoy por hoy tanto en cantidad como en calidad. Por fortuna, la historia del pastor alemán continúa avanti, no sin problemas y conflictos propios de las veleidades humanas, pero sí en un factor común global; el mejoramiento constante.
Relación de los Presidentes de la SV hasta hoy:
(Este documento es una recopilación de variadas fuentes calificadas. Su fin en www.appavalle.com es exclusivamente pedagógico).